allá va el primero con el que añadiremos un repujado de estaño sobre el elemento elegido.
Nosotros lo colocaremos sobre una caja de madera que únicamente hemos pintado con un barniz de color, quedando decorada por entero con esta lámina de estaño que ahora veremos como conseguir:
Materiales:
Lámina de estaño
Plantilla o dibujo que vamos a traspasar al lámina de estaño
Buril
Difunino
Cola o mezcla de cera y resina
Pegamento
Paso a paso:
1. En primer lugar "calcaremos" el dibujo sobre la plancha de estaño con ayuda del buril, teniendo en cuenta si la lámina de estaño elegida es de doble cara o no, es decir, si las dos caras son iguales (digamos que son lisas y brillan) o si una de ellas es diferente (mate). En el caso de que la lámina sea de una cara, debemos copiar el dibujo por la parte mate (cara A) que es donde trabajaremos para dar el relieve. La otra cara (cara B), la brillante, es la que se verá una vez terminado el trabajo.
Por lo tanto, pasaremos el dibujo en la cara (A), la mate.
2. Cuando hayamos terminado el primer punto, repasaremos el contorno exterior ayudándonos con el buril pero esta vez por la parte visible (cara B) de la lámina de estaño.
Para conseguir una mayor precisión debemos trabajar con la lámina sobre una superficie dura.
Para obtener el resultado deseado aquí es necesario trabajar sobre una superficie blanda como puede ser una bayeta o un paño doblado.
6. Por último colocamos la plancha sobre la superficie que queremos decorar, en este caso sobre caja de madera que previamente hemos barnizado.
Si lo deseamos, podemos dar otro efecto al repujado aplicando betún de judea de manera que conseguiremos darle un aspecto envejecido. Lo aplicamos con un pincel, dejamos que actúe un par de minutos y a continuación lo retiramos con un paño incidiendo en los relieves... y voilà!! tenemos decorada nuestra caja con un elemento que no necesita de más adornos.
Esperamos que os haya gustado y como siempre os animamos a que pongáis en marcha vuestra imaginación.
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